Al Azar

1.10.09

-De qué hablaban ustedes, si no es indiscreción? -De nada de algunos tópicos. -Pero de cuál? -Hablábamos de Cristo y su doble naturaleza.

-Parece que tu oreja vuelve a sangrar.
Es un crimen tratar de fingir con
pintura, las extrañas tendencias
que inspiran a la naturaleza.
No Teresa, no hay tal dios.
La naturaleza se basa a si misma.
Ese fantasma endiosado, no es más que
una patraña por unos cuantos arribistas.
Una chabacanería escandalosa que no
merece ni un minuto de reflexión,
una extravagancia vituperable,
que repugna el espíritu y revela al corazón.



Nunca debió salir de las tinieblas, más que para volver a ellas.
Si tu dios existe, yo lo detesto.
* i love you.