Dalton Trumbo (1905-1976)

Johnny cogió su fusil

Desaparición, confusión y
calma. Sueños, realidad y pensamientos.

Hablare directamente de la
palabras que pronuncio: este libro es uno de
lo que más recomiendo, aunque no este entre
los que más prefiera. Este libro es la mente
en un cuerpo. La mente sola, sola con el cuerpo
en lo ultimo de lo ultimo que pueda estar una masa cardiaca.
Ni la muerte ni el infierno puede hacer tanto.
Para esto que escribo no encuentro metáforas,
es la crudeza, con el solo intentar presentir con
el cuerpo del lector una milésima de desaparición, confusión y
calma con el solo intentar presidir
los sueños, la realidad y los pensamientos creo enmudecer.

Theodore Sturgeon (1918-1985)

Cuerpodivino.

Que importa tardar 18 años
cuando se tiene la esencia en
la punta de los dedos. El perdón y
el sexo, el arrepentimiento.
Ser que esta en forma de pájaro y
hombre desnudo, desnudo.
Que importa tardar 18 años si ha sabido
meterse y ser ocho protagonistas a la vez,
ser 4 hombres, 4 mujeres y un mesías.

Cuerpodivino, es sin dudas para mi,
el eslabón crucial a mi teología. Es la
obra que me pone fin a las novelas de
ciencia ficción que leía y sigo amando.
No hay tanto en el libro, sino fuera por su
fuerza, si no fuera por casi tocar a cada personaje.
De un protagonista del que poco habla y sin embargo
no necesita hablar.

Manuel Vicent (1936- )

Espectros

Un portal y algunas tumbas abiertas.
Ni el cansancio mas tronador
relame su heterodoxia.
Simples lugares simples objetos.
compasaría a Manuel Vincent
con un elefante dentro de una
pajarera. tan parado de lejos de todo
tan fundido en el humor ni bajo ni alto.
humor de turista.

Si opto por este libro primero en
escribir es: porque en esta obra
redondea la esencia de otro de sus
libros La carne es yerba (1985).
tal como si alguien despertara un día
de su cama y es otra cama en su mismo cuarto.

11. Berberis Thumbergii, var. atropurpúrea.

Arbusto de follaje rojo-vinoso;
hojas alternas o en fascículos;
espinas simples o trífidas; cara superior
de las hojas rojas inferior glauca,
espatuladas, enteras, de 5-20 mm. de largo,
cortamente pecioladas; flores amarillas,
rojizas por fuera, solitarias o
en fascículos; frutos elipsoideo, rojo claro,
de más o menos 1 cm. de largo.

Al igual que la anterior, esta variedad posee un
follaje muy vistoso, teñido de rojo-vinoso

.

Se ha dicho a lo lejos que yo hacia penitencia, pero qué haría yo con el arrepentimiento?

Cuantas veces he esperado al alba...
...en una mas desalentada...
y he visto llegar al alba sin que la mar estuviese calmada,
Sudor en las sienes. Debilidades. Abandonos.

Noche en la mar.

El hombre formó, imitando del modo posible los movimientos que veía y los ruidos que escuchaba, ciertas palabras...

39. Evonymus japonicus var. aúreomarginata.

Variedad caracterizada por poseer
sus hojas marginadas de amarillo;
al igual que la variedad
anterior es sumamente decorativa
y se multiplica de igual forma.

(Ver celastraceas n° 38)

Tus obras, Tomás no son ni buscadas ni leídas, ni tendran estimación aunque sean prohibidas por la Santa Inquisición.

Si te queda dormir en
entre los lagos de Mercurio
si hasta tomamos protagonistas
a un drama romántico escrito
como quien dice
de potencia a potencia.
Si nos queda acariciarnos
hasta sacarnos la piel
de fricción.

Entonces ahora que te escribo amor de mentira, ya no te extraño y podría suspirar tan fuerte... tan sin fuerza.

3. Juniperus communis, var. hibernica. Nombre vulgar: "enebro"

Arbusto de porte columnar; hojas
lineales, extendidas de 1-1,5 cm.
de largo, provistas de una banda
blanquecina en la cara superior,
levemente aquilladas en la cara
inferior; fruto baya globosa, de
5-6 mm. de diametro, de color
negro-azulado.

Especie originaria de Europa, Asia y Norteamérica

-De qué hablaban ustedes, si no es indiscreción? -De nada de algunos tópicos. -Pero de cuál? -Hablábamos de Cristo y su doble naturaleza.

-Parece que tu oreja vuelve a sangrar.
Es un crimen tratar de fingir con
pintura, las extrañas tendencias
que inspiran a la naturaleza.
No Teresa, no hay tal dios.
La naturaleza se basa a si misma.
Ese fantasma endiosado, no es más que
una patraña por unos cuantos arribistas.
Una chabacanería escandalosa que no
merece ni un minuto de reflexión,
una extravagancia vituperable,
que repugna el espíritu y revela al corazón.

Nunca debió salir de las tinieblas, más que para volver a ellas.
Si tu dios existe, yo lo detesto.