La de arriba, celeste.
Limpias y almidonadas
crujen y susurran
bajo el peso de mi cuerpo.
Son sábanas recién puestas
vírgenes y castas.
Al pie de la cama ,
enrolladas y pecaminosas,
las sábanas de ayer
dejarán en la tintorería
todos los besos
y suspiros
que se nos cayeron
de la piel.
/Laragione
nºxvi